Nos quedaba por valorar la última novillada de la fase clasificatoria del Circuito de Andalucía y yo lo resumiría con dos claves. Por un lado, una novillada muy buena y muy noble de Fermín Bohórquez, y por otro, un presidente bastante generoso que al final marcó la puntuación final. De hecho, los tres novilleros que torearon en Ubrique pasan a la siguiente fase, la competición es así.
El que más me gustó fue Javier L. Peregrino que demostró tener la cabeza despierta pese a ser un chaval que debutaba con picadores. Le vi cosas buenas. El Melli me pareció un chico muy preparado y con gran oficio; y a Mario Sánchez tengo que verlo de nuevo.
En general tenemos que ver más a todos, no podemos hacer juicio de valor prematuro ya que son chicos que están en su fase inicial y sería injusto hacer un veredicto definitivo.
Vamos a ver lo que pasa en las semifinales, me queda un poco de mal sabor de boca que no esté Diego Bastos ya que para mí ha sido el mejor. Pero eso indica la importancia de la suerte suprema, ya no solo en este Circuito, sino en la carrera de un torero. Ahora le quita no pasar a semifinales pero el día de mañana le puede quitar no salir por la Puerta del Príncipe o Puerta Grande de Madrid.
Tengo mis favoritos entre los seis semifinalistas pero luego sale el novillo y a veces no vemos lo que deseamos. Esperamos ver el sábado en Estepona un gran nivel con Marcos Linares, Mario Sánchez y Peregrino. Que gane el mejor, que aporten talento y personalidad y estaremos muy atentos a lo que vaya sucediendo.